Unos 200 bares impulsan desde hoy una campaña contra el ruido

Marivi Salvo – Viernes, 30 de Octubre de 2015

Habrá carteles para concienciar a los clientes y se impulsará un código de buenas prácticas hosteleras
Piden, no obstante, una normativa antibotellón

Pamplona – En torno a 200 bares del Casco Viejo van a poner en marcha desde hoy una campaña contra el ruido nocturno, de cara a concienciar a sus clientes de que el ocio no debe estar reñido con el derecho al descanso de los vecinos. Está impulsada por la Asociación Navarra de Pequeña Empresa de Hostelería (ANAPEH), la Asociación de Empresarios de Hostelería (AEHN) y la Asociación de Comercio y Hostelería del Casco Antiguo, con el objetivo de contribuir a que el problema de ruido y suciedad generado en el Casco Antiguo en los últimos años pueda minimizarse.

Los hosteleros, “conscientes del problema del ruido ocasionado por la presencia de público en la calle”, esperan que esta campaña “junto con otras acciones complementarias que se desarrollarán en el futuro”, empiece a “contribuir a sensibilizar a la opinión pública y a reducir el impacto del ruido nocturno sobre los vecinos del Casco Antiguo”, explicó Carlos Albillo, gerente de la Asociación de Comercio, Hostelería y Servicios del Casco Antiguo, quien añadió que “la van a llevar a cabo los bares de las tres asociaciones, unos 170, aunque también se les va a entregar al resto de establecimientos por si quieren sumarse”. Se calcula que en el Casco Viejo hay en torno a 230 bares.

La campaña, en castellano y euskera, consta de un cartel que se colocará en las puertas de todos los establecimientos, con la figura de dos mimos. Uno duerme y otro invita con un gesto a bajar la voz, bajo el lema Todos somos vecinos. En la calle, baja el volumen. Diviértete sin molestar.

“PROBLEMA DE CIVISMO” Porque las asociaciones de hostelería consideran que “estamos ante un problema de civismo y de comportamiento colectivo y es necesario concienciar a la gente en el respeto al vecino” y que “es necesario compatibilizar la actividad hostelera con el derecho al descanso de las personas que viven en el Casco”.

Además, se ha repartido entre los asociados un código de buenas prácticas donde “se informa sobre todas las normas que deben cumplirse, haciendo hincapié en aquellas que puedan contribuir a reducir los efectos de la presencia masiva de personas en la zona y sobre el descanso y bienestar de los vecinos”, tales como “cierre de puertas, emisión musical, prohibición de sacar bebidas a la calle, limpieza del entorno, etc.”, dicen y añaden que apostamos por “un modelo de ocio responsable, integral e integrador” porque “nuestros vecinos han sido siempre nuestros primeros clientes”.

No obstante, las asociaciones quieren dejar “bien claro que no servirá para solucionar el problema del ruido y la suciedad en las calles controlar o restringir la actividad hostelera (como se está haciendo con el horario de las barricas) si, al mismo tiempo, no se limita igualmente el horario nocturno de los comercios de venta de bebidas alcohólicas”, ya que estas bebidas “están destinadas a ser consumidas en el espacio público, esto es, a hacer botellón”. Por eso demandan una “normativa antibotellón, como existe en otras 11 comunidades”, además de una normativa de aforos “clara y adecuada, y que tenga en cuenta las diferentes características de cada local”.

Bares nuevos

79 Locales nuevos han abierto en el Casco desde que se levantara la veda en 2006.

Beber en la calle

Ordenanza de Terrazas. Entró en vigor en 2013 y modificada en 2015. En su artículo 12, f: “Será obligación del titular proceder al cierre de la terraza en caso de que los usuarios de las mismas produzcan molestias al vecindario, así como impedir que los usuarios de la terraza saquen las consumiciones fuera de la zona autorizada como tal”.

Ordenanza Conductas Cívicas. En su artículo 20, regula que “todos los ciudadanos están obligados a respetar la tranquilidad y el descanso a los vecinos”, y “no se permitirán actividades que generen molestias al vecindario, en especial en horario nocturno”.

Decreto Foral 202/2002. En su Disposición Adicional Segunda señala que los titulares de los establecimientos “no permitirán sacar bebidas fuera del local o de las zonas autorizadas como terrazas”.

Ley estatal 4/ 2015 De Seguridad Ciudadana o ‘Ley Mordaza’. Recoge en su artículo 37. Infracciones leves, con multa de 100 a 600 €, “el consumo de bebidas alcohólicas en lugares, vías, establecimientos o transportes públicos cuando perturbe gravemente la tranquilidad ciudadana”.

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