El alcalde de Vila-real declarará como investigado tras una querella por los ruidos de las tascas
Europa Press 1 de octubre de 2019
También deberán declarar en calidad de investigados la concejala de Seguridad del Ayuntamiento, Silvia Gómez, y cuatro empresarios de la zona de las tascas de Vila-real. Las diligencias están abiertas por presunta prevaricación y contra la ordenación del territorio
El alcalde de Vila-real (Castellón), José Benlloch (PSPV-PSOE), deberá declarar como investigado en el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de esta localidad, que ha abierto diligencias tras una querella presentada por unos vecinos por los ruidos de las tascas, según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana (TSJCV).
Además del alcalde, también deberán declarar en calidad de investigados la concejala de Seguridad del Ayuntamiento, Silvia Gómez, y cuatro empresarios de la zona de las tascas. Las diligencias están abiertas por una querella por presunta prevaricación y contra la ordenación del territorio.
Por otra parte, el consistorio de Vila-real ha informado en un comunicado que el alcalde ha conocido el contenido del informe técnico que servirá de base para consensuar una nueva regulación de la actividad de los locales de restauración de la calle Pare Molina, zona conocida como tascas, «que dé respuesta a la realidad social y que permita compatibilizar la actividad y la convivencia en la zona».
Benlloch se reunió este lunes con el abogado externo contratado por el Ayuntamiento «para definir las opciones técnico-jurídicas» que tiene el consistorio con el objetivo de establecer «una nueva regulación consensuada que garantice la normal convivencia entre locales de ocio y vecinos de la zona».
INFORME TÉCNICO
El alcalde de Vila-real, José Benlloch, aseguró este lunes que acababa de conocer el contenido del informe técnico que servirá de base para consensuar una nueva regulación de la actividad de los locales de restauración de la calle Pare Molina, que dé respuesta a la realidad social y que permita compatibilizar la actividad y la convivencia en la zona.
Benlloch se reunió este lunes con el abogado externo contratado por el Ayuntamiento para definir las opciones técnico-jurídicas que tiene el consistorio con el objetivo de establecer una nueva regulación consensuada que garantice la normal convivencia entre locales de ocio y vecinos de la zona.
«Con este estudio ya sobre la mesa, he procedido a convocar de inmediato la reunión de la mesa técnica de coordinación formada por los departamentos municipales implicados», avanzó José Benlloch, quien añadió que el siguiente paso será planificar una reunión entre los representantes legales tanto de los vecinos como de los locales de restauración con la representación legal del Ayuntamiento para «intentar consensuar una propuesta desde el punto de vista técnico».
Posteriormente, se mantendrán encuentros directamente con los vecinos y con los propietarios de los establecimientos de ocio.
ORDENANZAS
Benlloch avanzó asimismo que este informe apunta a la posibilidad de modificar dos ordenanzas municipales: la Ordenanza Municipal de Convivencia Ciudadana y la Ordenanza reguladora de terrazas con finalidad lucrativa en la vía pública desarrollada por establecimientos de restauración.
Mesa técnica
La mesa técnica de coordinación se reunirá en el Ayuntamiento de Vila-real el próximo viernes 11 de octubre a las 12.30 horas con la participación de técnicos del departamento jurídico, Policía Local, Urbanismo, Sanciones y Sanidad, así como el abogado externo especialista contratado por el Ayuntamiento.
En este encuentro se analizará el informe y se cerrará una propuesta que después se trasladará a los representantes legales de los vecinos y empresarios a través del abogado externo, que actuará como interlocutor del Ayuntamiento en las reuniones.
Cabe recordar que en marzo de este año se pudo saber que varios residentes de la calle Pare Molina de Vila-real denunciaron molestias por la concentración de clientes en la vía pública. Por su parte, los bares iniciaron una recogida de firmas para defender su actividad, negando las molestias señaladas por los vecinos.