Contra el botellón, consensuar con los jóvenes un ocio alternativo
Pedro Gómez 15/09/2021
La primera reunión de la mesa organizada por el Ayuntamiento hace un diagnóstico del problema de convivencia
Escuchar más a la juventud, plantearle alternativas de ocio pero contando con ella, sin criminalizarla. Pero también hacer cumplir la legalidad. La mesa creada por el Ayuntamiento de Pamplona para reflexionar sobre el botellón no ha aportado de momento medidas concretas, pero los once participantes coinciden en que se ha dado el primer paso de escucharse y hacer un diagnóstico de una compleja situación que ha afectado a la convivencia. “El tono ha sido de respeto y apertura, sin confrontación”, señaló uno de los presentes.
El alcalde de Pamplona, Enrique Maya y el vicepresidente del Gobierno de Navarra, Javier Remírez, presidieron la primera reunión. Asistieron el psicólogo Emilio Garrido; el jefe de la Policía Municipal, Javier Goya; el presidente del Consejo de la Juventud de Navarra; un representante de la asociación Convivir en lo Viejo; un portavoz del vecindario de San Juan; y dos hosteleros. El concejal de Seguridad Ciudadana, Javier Labairu, y el de Deporte y Juventud, Fernando Aranguren, completaban la mesa. Cada uno debía hacer un diagnóstico y luego plantear soluciones.
Los representantes vecinales reclamaron que, más allá de lo sucedido en los últimos días, el botellón, como problema de convivencia, es un reto estructural. Las personas participantes analizaron propuestas de ocio alternativo para la juventud, como el relacionado con el gaming (juegos digitales). El concejal de Juventud señaló que “de madrugada es complicado ofrecer una alternativa de ocio”. Remírez apuntó que el mayor horario para las discotecas y bares especiales y la apertura de las bajeras van a “ayudar” a descongestionar el Casco Antiguo.
Labairu y Goya hicieron un balance de las actuaciones policiales de las últimas tres semanas. Se ha intervenido en 131 botellones en Yamaguchi y Pío XII, Casco Antiguo, Ciudadela y Vuelta del Castillo y San Juan, además de en 40 fiestas en pisos y 56 peleas en zonas de ocio nocturno. También se han interpuesto 10 denuncias a establecimientos de hostelería. La reunión acabó valorando la posibilidad de mantener en activo este grupo de trabajo en el formato que se considere más eficiente, incluyendo la presencia de expertos.
Juan Gutiérrez, Consejo Juventud Navarra: “No sirve esconder el problema en las discotecas y bajeras»
Juan Gutiérrez, presidente del Consejo de la Juventud de Navarra, planteó que lo importante no es abordar el problema coyuntural de lo que ha ocurrido en los últimos tiempos sino los “problemas estructurales” que tiene la juventud, principalmente la “situación socioeconómica, con incorporación tardía al mercado laboral, con bajos salarios, con el consiguiente problema de emancipación”. “Nuestro modelo de ocio -explicó- es el mismo que el de otras generaciones, socializar y tomar algo. Lo que cambia es el lugar debido a la menor capacidad de gasto”, expuso. Gutiérrez consideró que es el momento de dejar de “criminalizar a la juventud”. “La juventud no es perfecta, pero no tiene más imperfecciones que el resto de la sociedad”, expresó.
Gutiérrez expuso que a corto plazo “no vale esconder el problema debajo de la alfombra, en las discotecas o en las bajeras”. Apostó por abordar el modelo de ocio para la juventud, “pero sin paternalismos, desde la participación, preguntando a la juventud qué quiere”. “Pero también es una buena ocasión para analizar cómo mejorar el empleo, el acceso a la vivienda, la salud mental de la juventud y qué recursos públicos deben destinarse”.
Emilio Garrido, psicólogo: «La juventud no ha podido autoafirmarse y definir su espacio»
“Los jóvenes, por su propia juventud, siempre han necesitado autoafirmarse, provocar y definir su espacio. Pero en estos dos años de pandemia se han visto esclavizados y amordazados por una estructura de miedo profunda. No han podido definir su espacio y muchos han tenido que emigrar al hábitat familiar”, expuso el psicólogo Emilio Garrido, que relacionó el deterioro de salud mental con la mayor ideación de suicidios que se está detectando. Y citando a una colega norteamericana, añadió: “Estamos al borde de la peor crisis de salud mental en décadas”.
Como soluciones, primero apuntó que no hay que criminalizar a la juventud: “Todos hemos sido jóvenes”. Abogó por reuniones con delegados de las universidades, estudiantes de FP y de los institutos y ver con ellos “la forma de gestionar otra libertad”. “Tras la pandemia hemos quitado la espita. La violencia es antropológica, debemos educarla y conducirla”. Alertó de riesgos añadidos, “porque la cultura del beber va unida a la droga”. Y por último, Garrido ve necesario destinar más recursos y profesionales a la salud mental. “La pandemia me ha hecho ver la enorme inmadurez emocional. Es un campo que se ha estudiado muy poco”, concluyó el psicólogo.
Roberto Recasens, hostelero: «El primer paso es tener una ley antibotellón clara y completa»
“Si se quiere abordar el problema de los botellones el primer paso es dotarse de una ley antibotellón clara, completa, transversal y que sea realista en su cumplimiento”. Para Roberto Recasens, representante de la Asociación Navarra de Pequeña Empresa de Hostelería (ANAPEH), este es el punto de partida. “Actualmente, no sabemos si existe una norma antibotellón. Parece que sí, pero ni las administraciones tienen claro dónde están los límites. Nos dicen que las sanciones son en base a las molestias que causan a los vecinos. No sé si la solución es prohibir el botellón o prohibir determinadas conductas”, añadió este hostelero, de la Vermutería Río en la calle San Nicolás.
En cuanto a lo ocurrido estos últimos jueves, el deseo de los hosteleros es que “vuelva a ser lo de antes, con la clientela que hemos tenido siempre”. “No entendemos que tenga que haber un ocio de borrachera a las siete de la tarde, que la juventud tenga prisa por darse un atracón de alcohol”, añadió Recasens. El representante de ANAPEH añadió que la Policía Municipal se ha comprometido a estar este jueves de manera preventiva a primera hora de la tarde antes de que se formen las aglomeraciones.
Representante vecindario. Barrio de San Juan: «En Yamaguchi se han vivido situaciones muy desagradables»
Un vecino del Casco Antiguo y una residente del barrio de San Juan relataron en primera persona lo que ven en sus calles, plazas y parques. El parque de Yamaguchi se convirtió la pasada primavera en una proliferación de botellones, una situación que “no era en absoluto normal por la agresividad y las situaciones de intimidación” que ha vivido el vecindario”, expuso la representante del barrio de San Juan. “Hemos vivido episodios muy desagradables de incivismo, suciedad, meadas, coches con retrovisores rotos. Se cobijaban en los portales y pasabas miedo”, enumeró.
Según su relato, la policía acudía cuando se le llamaba. “Los chavales salían corriendo con sus bolsas blancas y se escondían detrás de los árboles”. Ahora, Yamaguchi está más tranquilo, apunta, al parecer porque los que convocaban estos botellones han cambiado de ubicación. Esta vecina aclaro que los estudiantes que viven en la zona no estaban en Yamaguchi. “Ellos tienen otro tipo de diversión. Sí, hacen fiestas en pisos y beben, pero no es esa agresividad”, opinó. La representante se mostró satisfecha de que se escuche a los vecinos. “Ha sido una reunión fructífera porque también es bueno escuchar a los jóvenes”, concluyó.