Vecinos que no pueden más: bucle sonoro en San Nicolás

Noelia Gorbea 9 de diciembre de 2023

Denuncias, sanciones por sonometrías positivas y un problema de ruido que no cesa; el Defensor del Pueblo pide al consistorio que tome medidas

Miedo a Nochebuena, pánico a Nochevieja. Es la tesitura a la que se enfrentan estos días un grupo de vecinos de la calle San Nicolás. En concreto, residentes a la altura del portal número 11 de la conocida zona de ocio del Casco Viejo de Pamplona aseguran que ya no pueden más. “Llevamos más de un año ‘vendidos’ con este tema. No sabemos qué más hacer, por lo que solicitamos a la administración que tome ya las medidas oportunas ante el incumplimiento de la legalidad del bar que denunciamos”, esgrimen los afectados a través de un escrito elevado al Defensor del Pueblo.

Pero no es, ni de lejos, la primera ficha que mueven, ya que afirman haber perdido la cuenta del número de instancias que han rellenado, así como de las veces que han requerido la presencia de Policía Municipal de Pamplona para realizar una, otra y otra sonometría más. Todo comenzó en agosto de 2022, momento en el que los vecinos de esta parte de la calle San Nicolás trataron de hablar con el propietario del local (alegan que les hizo “caso omiso”) acerca de los niveles elevados de la música, especialmente sábados y vísperas de festivos, así como de la hora de cierre (más de las dos de la madrugada). “Nos dificulta gravemente el descanso”, valoran.

ANÁLISIS Y EXPECTATIVA
Fue en enero de este año cuando los vecinos, desesperados, ya empezaron a denunciar formalmente los hechos ante el consistorio. Cabe resaltar que en diversas sonometrías se superan los decibelios permitidos (se registran hasta 88 cuando el nivel sonoro interior máximo autorizado en su licencia es de 70 dBA). Además, desde Salud Ambiental del Ayuntamiento de Pamplona se comprobó el tarado del limitador de emisión musical, el anclaje de los altavoces en las paredes, y se descargaron los registros de emisión musical de meses anteriores para su análisis. “Se sancionó al propietario con 1.200 euros y se le exigió que cumpliera con las especificaciones dadas por los técnicos”, aclara el consistorio.
Ahora, a la vista de la reincidencia por comisión de más de una infracción de la misma naturaleza, se plantea una multa de 1.350 euros. “Consideramos que los dueños del bar son conscientes de que fechas como ha pasado en San Fermín, San Fermín Txikito, pasará en Nochebuena, Nochevieja, etc”, remarcan los vecinos, que no confían en que la solución llegue pronto.

Como guinda, insisten en que el citado local tiene licencia de cafetería, y que “para nada cumple con normativa”. “Por mucho que al día siguiente sea domingo, hay personas que trabajamos y tenemos que madrugar”, se quejan. Cabe resaltar, y así lo recuerdan desde el Defensor del Pueblo, que el Tribunal Constitucional avisa de que la contaminación acústica afecta a derechos fundamentales y que puede ser “fuente permanente de perturbación” de la calidad de vida de los ciudadanos.

De ahí que se recomiende a Pamplona adoptar medidas efectivas para que cesen los ruidos excesivos del local de hostelería. “Necesitamos ayuda”, reiteran los vecinos desde San Nicolás.