No a cierta hostelería
Fernando Zoco Marcos 21.05.2021
Después de tanto tiempo de pandemia y restricciones, el hecho de tomarte un café en un bar hace que sea una labor complicada y, a veces, hasta con cierto riesgo de conflictividad. No a la hostelería que te cobra a precio de oro un café que estás obligado a tomar en la calle. Una subida de precios debida a las circunstancias de la pandemia. Sería deseable que estos precios volvieran a su estado original y una nueva distribución de las mesas para que quepan más comensales, eso sí, cumpliendo todos con las medidas de seguridad, pero no en mesas más pequeñas para ubicar a más número de comensales y estén todos en la terraza.Sí, hay que estar ahí afuera, pero hay que estar bien –al margen de las inclemencias del tiempo– con un servicio adecuado. No siempre se da. Hay que adaptarse a las circunstancias, comemos en la terraza y nos cobran un suplemento por estar ahí, pero es que no se ha podido estar en otro sitio.También hay que decir que a veces el trato al cliente no es el correcto. Todos estamos cansados de esta situación que vivimos por la pandemia, pero unos se quejan más que otros. Y sí, todos perdemos mucho en el aspecto económico, laboral, de ocio, etcétera, pero no vayamos de víctimas, porque otros han perdido la vida. Y qué decir de la invasión de las terrazas, que parece la conquista del Far West, la conquista del Oeste. Añoro y adoro aquellos bares que cantaba Gabinete Caligari, bares entrañables y llenos de amor. Los hay, tan solo hay que buscarlos, están a la vuelta de la esquina.Por favor, señores y señoras hosteleros/as, traten con cariño a sus clientes. Nosotros también lo haremos. Sí a esta hostelería.