Defensor del pueblo/ Festival Pim Pam, Ville…
José Antonio Lezaun, miembro de Convivir en lo Viejo/Aldezaharrean Bizi 15 de septiembre de 2017
Según la Resolución del Defensor del Pueblo de Navarra (Q17/471), el 19 de junio de 2017 un vecino del Casco Viejo, al que desde aquí doy las gracias, formuló una queja ante ellos por las molestias que sufren los vecinos del Casco Antiguo por las actividades que se desarrollan en sus calles.
Seguidamente, esta institución, se dirigió al Ayuntamiento de Iruña, solicitando que informara sobre la cuestión suscitada. Les transmite como queja del vecino: 1. Que reside en el casco antiguo de Pamplona y sufre, con asiduidad, molestias derivadas de los ruidos, suciedad y olores existentes en dicha zona de la ciudad. 2. Que a su parecer, no debería autorizarse música en la calle con instrumentos de percusión, ni amplificadores de sonido. 3. Que casi todos los fines de semana se organizan, por parte del Ayuntamiento de Pamplona, eventos en la Plaza del Castillo en los que se utilizan altavoces, lo que supone una molestia para los vecinos.
Debe haber epidemia, este vecino representa a muchos de nosotros que sufrimos lo mismo en nuestras calles y plazas. La queja de este residente que el Defensor del Pueblo transmite al Ayuntamiento, comparada con la contestación que este Ayuntamiento da a esa institución del Defensor, me recuerda aquello de ¿Adónde vas? Manzanas traigo. El Municipio sólo se hace responsable de aquellos ruidos procedentes de las actividades coorganizadas entre el servicio de Comercio del Ayuntamiento de Pamplona y la Asociación de Comerciantes, Hostelería y Servicios del Casco Antiguo. Eso sí, “todas ellas con el objetivo de dinamizar las principales calles comerciales del Casco”.
¿Y aquellos eventos que autorizan a petición de otros? Vamos a ver, todas las actividades a realizar en la vía pública deben ser autorizadas por el Ayuntamiento. Por lo tanto el Ayuntamiento es responsable de todas las actividades que se realicen en la calle, tanto si los autorizan a petición de otros, como si son consensuados con “La Asociación”. Hay eventos que son más de dinamitar la calidad de vida del vecindario, que de dinamizar nada que a los vecinos interese, ustedes socializan los costes (nuestra salud) y privatizan las ganancias (la caja de unos cuantos).
Y rematan. “Por todo ello consideramos que las actividades organizadas por el área de comercio del Ayuntamiento de Pamplona / Iruña al desarrollarse durante el horario comercial habitual y adecuarse a la Normativa vigente no generan especiales molestias a los vecinos/as del Casco antiguo”
Uno de los párrafos que forman parte de su alegato: “En cuanto a los ruidos y molestias ocasionados por altavoces, amplificadores e instrumentos de percusión, nos remitimos a la normativa del área de ecología urbana y movilidad pero insistimos en que éstos, de producirse lo son en horario comercial sin que afecten a las horas normales de descanso”. Desconocía que cada Área de este Ayuntamiento, dispusiera de una normativa ad hoc. Miren ustedes, si en lugar de remitirse al Área de Ecologia Urbana, cuya normativa desconozco, se habrían remitido al Área de Protección Ciudadana, a los que yo consulté en su día, estarían informados de que la normativa aplicable está en el Decreto Foral 135/1989 que en su articulo 15.1 dice que en zonas residenciales no se permiten actividades que sobrepasen los 55 decibelios en horario diurno. Por lo tanto en nuestras calles y plazas, altavoces, amplificadores ó elementos de percusión, ¡prohibidos por normativa! Es lo que tiene el abuso, al final el vecino se rebela.
La institución del Defensor del Pueblo conoce Iruña, lo Viejo, sus calles y su problemática y aparte de enumerar una serie de normas y leyes, en el punto 5, antes de resolver la queja del vecino, hace ver al Ayuntamiento que su alegato no sirve y en ese párrafo, de toda esa Asociación de Comerciantes, Hostelería y Servicios del Casco Antiguo, que tanto coopera con el Municipio, sólo deja en pie “La Hostelería” y dice: “La zona a la que se refiere el autor de la queja, el casco antiguo de Pamplona, es, sin duda, una de las principales zonas de la ciudad donde habitualmente se concentra un número elevado de personas que acuden tanto a los numerosos negocios de hostelería existentes como a las actividades que organiza el propio Ayuntamiento de Pamplona. Todo este conjunto de actividades, así como las personas que acuden a las mismas, son susceptibles de causar, con la emisión de ruidos excesivos, molestias a los vecinos, por lo que se ve conveniente formular un recordatorio con carácter general al Ayuntamiento de Pamplona-Iruña de su deber de proteger los derechos de los vecinos afectados”.
A ver si acabo. El Ayuntamiento, en su exposición, pone como uno de los ejemplos a destacar el Mercado Medieval de los Tres Burgos. Describe que durante tres días y coincidiendo siempre con las cercanías del 8 de septiembre (Privilegio de la Unión), varias calles del Casco Antiguo acogen los puestos de temática Medieval, todo ello acompañado de música, teatralizaciones y talleres de oficios de antaño. El horario es de 11.00 a 14.00 h y de 17.00 a 21.00 h.
Precisamente este año, este Ayuntamiento, como muestra de lo que le importa su inclusión negativa en el Informe anual correspondiente al año 2017 que la institución del Defensor expondrá ante el Parlamento de Navarra, el Privilegio de la Unión contó con un festival de conciertos que comenzó a las 12 horas del sábado y acabó a la 1 hs. del domingo. Según mediciones hechas por vecinos de La Mañueta, en el Pim Pam Ville del Privilegio, se sobrepasaban los 100 decibelios en sus balcones. Si desde el Ayuntamiento me dicen que ésas no son sus mediciones, perdónenme, pero no creo que ustedes hayan hecho medición alguna. De haberlas hecho, ante un delito y en su función de policía, su obligación habría sido suspender el festival.
Para acabar, una petición a la institución del Defensor del Pueblo. Para el 01-10- 2017 el Ayuntamiento debía responderles si acepta esta resolución, y, en su caso, las medidas adoptadas para su cumplimiento. El Ayuntamiento ya les ha respondido, la preocupación que tienen por verse reflejados negativamente en el informe anual de su instituición, queda cuantificada al autorizar a pesar del requerimiento del Defensor, los conciertos del Día del Privilegio, una barbaridad y un atentado contra los más elementales derechos de los residentes. Si además existe una alta probabilidad de que esto se repita en breve y a menudo ¿no sería obligado un toque a la fiscalía?